Si se hiciera un estudio sobre esta costumbre de comenzar algo nuevo en septiembre, al igual que ocurre en enero, seguramente habría un porcentaje bastante alto de personas que empiezan con alguna nueva actividad en su vida y pronto lo dejan o ni siquiera lo inician. La gente, de primeras, se entusiasma mucho, llena su boca con muchas palabras, que como tales que son, ya sabemos lo que pasa: que las palabras se las lleva el viento y también están aquellos que por lo menos lo intentan pero tienen "arrancada de caballo y parada de burro" y después de unos pocos intentos, desisten y lo dejan. Pero ¿por qué ocurre esto? Porque realmente se mueven como lo hacen las masas, que nos llenan la cabeza de que hay empezar cosas nuevas en septiembre y/o en enero y ¿por qué no en febrero, marzo, abril, mayo, junio, julio, agosto, octubre, noviembre o diciembre? Cualquier momento es bueno, si vamos a iniciarnos en alguna actividad nueva no importa en que mes estemos, lo que verdaderamente cuenta es las ganas de introducir cambios en tu vida y dejarte de palabras, ponerte manos a la obra y entrar en acción y una vez que lo hagas, esforzarte día a día para ir mejorando, los comienzos nunca son fáciles pero rendirse a las primeras de cambio no sirve de nada, así que si quieres tienes algún propósito, objetivo y/o reto que cumplir, tendrás que luchar todos los días para conseguirlo.
Aunque aquí haya muchas palabras, también hay acción. Antes de empezar con el blog no le dije a nadie que iba a escribirlo, me puse a escribir y ya está (¡acción!), lo mismo ocurre cuando me inicié en salir a correr (¡acción!), hacer gimnasia en casa (¡acción!) e incluso cuando retome el baloncesto (¡acción!) hace unos meses y la natación (¡acción!) como he hecho hace poco, en ningún momento le dije a nadie voy a hacer esto, lo hice y punto. Hay que entrar en acción; ¿cómo se demuestra el movimiento?: "El movimiento se demuestra andando", pues más fácil imposible.
Así que yaa sea en la práctica deportiva o en cualquier otro aspecto de nuestras vidas, siempre tenemos que estar activos, movernos, nadie lo va a hacer por nosotros, así que: 3, 2, 1... ¡acción!