martes, 23 de julio de 2019

53.VIII Carrera Nocturna Ciudad de Balerma. 20 de julio

Como ya os decía por Facebook hace unos días, desde mayo llevaba sin correr una distancia superior a 5-6 km, así que decidí apuntarme a esta carrera de 9 km para ver qué tal iba y cuáles eran las sensaciones, no conocía el recorrido, ya que desde niña no había ido a Balerma, así que esta carrera fue un viaje a lo desconocido.

En este viaje no estaba sola, iba muy bien acompañada por mis compis de coche y entrenamiento (Silvia y Paloma) y por compañer@s de C.A. Universo Running, algunos conocidos de los entrenamientos como Carlos, Gabi, Gabrielillo, Luis y Tania y otros no, como Miguel Ángel, Antonio y Juan Carlos


Lo único que sabía era la distancia 9 km, que eran 2 vueltas a un circuito de 4,5 km y que no había cuestas, bueno y también que iba a haber mucha humedad y mucho calor pero no tanto como el que hizo.  La primera vuelta muy bien con buenas sensaciones a pesar del calor, iba volando y en los avituallamientos, las botellas de agua me hacian de ducha para así ir aguantando el tirón pero ya al comienzo de la segunda vuelta, batacazo entre el km 5 y el km 7, no podía tirar de mi cuerpo, iba muy lenta, hasta se me pasó por la cabeza retirarme, pero como soy cabezota y todo lo que empiezo lo tengo que terminar, pues seguí y me alegro de haberlo hecho porque sobre el km 7,5 empecé a recuperar y terminé la carrera a unos ritmos similares a los de la primera vuelta.

Crucé la meta de mi 53ª carrera, cansada pero contenta y un poco mareada. Allí tenía a varios de mis compañer@s de C.A. Universo Running esperando, alegra mucho ver caras conocidas cuando has tenido momentos de la carrera en los que has sufrido. Agradecer también los ánimos de much@s de ell@s que al cruzarnos en diferentes puntos durante la carrera, me animaban y yo a ell@s. Añadir que, según tiempos oficiales de carrera (5:56 min/km), conseguí el objetivo que me había propuesto y era hacer esta carrera, corriendo por debajo de 6:00 min/km.

Ahora toca seguir entrenando para seguir mejorando


martes, 9 de julio de 2019

52.V Carrera Nocturna contra el cáncer Ciudad de Almería



Hay días en los que te despiertas con una mezcla de sentimientos y sensaciones que ni siquiera un@ mism@ entiende, justo lo que me pasó el sábado 6 de julio: estaba motivada, ilusionada, con energías pero, al mismo tiempo, nerviosa y preocupada.





-Motivada: porque tras el cambio de club, de entrenador, de forma de entrenar, etc. tenía ganas de participar en una carrera y probarme a ver qué tal iba
-Ilusionada: porque era la primera carrera que hacía con mis nuev@s compañer@s
-Con energías: porque no me encontraba cansada a pesar de haberlo dado todo en los entrenamientos grupales de la semana.
-Nerviosa: no sé por qué, hacía tiempo que no me ponía nerviosa en una carrera
-Preocupada: por varias cosas pero sobre todo por el calor y la humedad, que durante la semana me habían fastidiado, haciendo que me encontrara peor con la alergia.



Y así con estas sensaciones, me planté en la V Carrera Nocturna contra el cáncer Ciudad de Almería junto con Silvia, mi amiga y compi de entrenamientos desde hace ya 1 año más o menos. Creo que ella iba más o menos como yo, a lo que sensaciones se refiere.

Llegamos a los pies de la Alcazaba donde ya se concentraban muchos corredores y eso que quedaban 45 minutos para que se diera la salida. Al llegar allí, y poco a poco, nos fuimos encontrando con más compañer@s de C.A. Universo Running, estuvimos charlando, echando algunas fotos y calentando un poco por la primera cuestecilla que nos íbamos a encontrar en la carrera, empezamos a sudar la camiseta ya antes del comienzo de la prueba, que se retrasó unos minutillos.

Algun@s de nosotr@s nos colocamos más o menos al principio para así luego no tener que estar adelantando a mucha gente. Cuenta atrás 10, 9, 8, 7, 6, 5, 4, 3, 2, 1 y ¡a correr! o mejor dicho ¡a volar! porque muchos participantes salieron tan rápido que ni se les veía, ya de primeras, los había perdido de vista (creo que el hecho de que el cielo amenazara tormenta, provocó que en lugar de correr, much@s volaran).

Salí a mi ritmo, sin prisas pero sin pausa, muy contenta con las sensaciones que tenía, a pesar del calor y la humedad, y que mi reloj confirmaba al paso de cada kilómetro. En el avituallamiento, sobre el kilómetro 2 aproximadamente, tuve que bañarme (literalmente) con la botella de agua porque si no, no iba a llegar a meta de la humedad y el calor que hacía. Evidentemente (y es algo que yo tenía claro que iba a pasar) al llegar a la subida de la Rambla, iba a ir más lenta, lo mismo que en la subida del Paseo, fueron los únicos tramos que hice por encima de  6 minutos/kilómetro, en los demás llevaba un ritmo estupendo para mí (5:50-5:59 min/km), teniendo mis circunstancia (alergia y resfriado) y las circunstancias climáticas (humedad y calor).

Añadir que siempre que podía y durante toda la carrera, les chocaba la mano a much@s de l@s niñ@s que animaban a lo largo del recorrido, si no lo hiciera, no sería yo. Se agradecen mucho estos ánimos y sobre todo en las subidas, gestos espontáneos que te llegan y que te dan fuerzas para continuar.


Se terminaba con una pequeña subida y ya sabiendo el recorrido, lo poco que me quedaba: 400-500 metros, más o menos y que me encontraba bien de fuerzas y de ánimos, decidí apretar, lo que hizo que adelantara a bastantes personas y que llegara a cruzar la meta como si nada, no había notado ese pequeño esfuerzo de más en esos últimos metros (que corrí a 5:30 min/km), lo que provocó que al llegar al punto final, saltara de alegría, estaba contentísima: por haber terminado con buenas sensaciones, por haber aportado mi granito de arena a esta carrera solidaria y por ver a mis compañer@s esperándome, en esos momentos no sabía ni el tiempo ni el ritmo que había hecho, me daba igual, lo único que importaba era lo bien que me sentía conmigo misma. Minutos después supe que había mejorado 3 minutos mi tiempo del año anterior (mismo recorrido) así que mayor subidón aún.

Repusimos energías, charlamos y luego a felicitar y aplaudir a todos aquellos que se subieron al pódium

Un día que había comenzado con una mezcla de sensaciones buenas y malas, terminó de la mejor manera posible: disfrutando de la carrera, muy contenta, con muchas energías a pesar del esfuerzo, muy ilusionada y muy motivada para seguir entrenando y seguir mejorando para próximas carreras y así conseguir los objetivos que me he propuesto.

¡Muchísimas gracias a tod@s l@s compañer@s de C.A. Universo Running allí presentes, también a l@s que no estaban y nos animaron a l@s demás vía Whatsapp, a mis padres, a mi amiga María y a tod@s aquell@s que me animasteis en persona, por otros medios y/o me escribisteis por Facebook!






También agradecer a tod@s l@s voluntari@s que estaban a lo largo de todo el recorrido, ya que sin ell@s, una carrera tan bonita y por una buena causa, no se podría celebrar, lo sé por experiencia porque yo antes era un@ de ell@s